Crema de apio

 


Este pasado otoño costó quitar la ropa de abrigo, pero ahora ya entrada la primavera no la guardamos ni de broma... menudo frío, nevando en abril!

Así que con este panorama lo que apetece son cositas calientes... por eso mi propuesta de hoy va destinada a entonar el cuerpo,  pero cuidándose. Esta crema es ideal para ayudar  a controlar el peso gracias a las propiedades diuréticas y depurativas de sus ingredientes, además la combinación de apio y cebolla potencia dichos efectos... y está muy. muy rica!

El apio:

La receta de hoy procede de un libro que se titula  "100 Recetas  Sanas con alimentos que curan" y es compañero de  "100 Alimentos que mejoran tu salud" , en el que se encuentra, claro está: el apio, así que aprovechando que llueve, vamos a conocerlo un poquito más.

Esta sana y refrescante verdura se caracteriza por su gran efecto diurético y su  ligereza (15 Kcal)

El 75% de su peso es agua y tiene un alto contenido en potasio (256 mg). Ambos factores juntos  hacen que el apio sea un alimento muy adecuado en caso de edemas y retención de líquidos. Desde el punto  vitamínico y mineral no destaca del resto de verduras, pero su aceite esencial,  el apiol, está repleto de sustancias muy beneficiosas para nuestra salud.

Es un aliado de las dietas, ya que es muy ligero,  saciante, favorece la digestión y la expulsión de gases y ejerce un ligero efecto laxante.

Por si fuera poco , estimula la actividad de las glándulas suprarrenales, por lo que puede ayudar en casos de hepatitis e ictericia y también en afecciones pulmonares  como el asma o la bronquitis. 

Yo, después de esto ya me hago devota del apio... ¿y vosotros?

 Ingredientes:

• 1 apio 
• 2 puerros
• 1 cebolla
• 1 patata
• 1 litro de caldo
• Aceite de oliva virgen
• Sal
• Pimienta

Elaboración:

1. Se lava el apio, le retiramos los filamentos fibrosos del tallo y lo troceamos. 
2. Pelamos la patata y la troceamos.
3. Retiramos la base y la parte vede de los puerros, se lavan bien y se trocea la parte blanca.
4. Se pica la cebolla y se rehoga en una cucharada de aceite hasta que esté transparente. Incorporamos los puerros troceados y  cocinamos unos minutos más, a fuego muy suave sin dejar que tomen color. sazonamos con sal y pimienta.
5. Cubrimos con el caldo y añadimos las patatas y el apio. Dejamos cocer a fuego suave durante 20 minutos.
6. Trituramos y si se quiere una crema muy fina se pasa por el chino. Retificamos el punto de sal si fuese necesario.
7. Yo suelo tomar esta crema con semillas de girasol o cacahuetes crudos, sin tostar... me encanta esa combinación que descubrí por casualidad, los machaco ligeramente y se los añado.
8. La receta original aconseja servirla con unos palitos con queso o, para que resulte más ligera y nutritiva, de unos crudités de verduras: apio, zanahoria...

Y hablando de sopas y cremas ligeras os dejo un par de enlaces, una caliente, por si la cosa tarda en mejorar...  y una fresquita por si viene el sol que es lo que realmente nos apetece... ¿a que si?

Sopa de calabaza, apio y arroz

Sopa fría de pera y pepino

Buenas Noches!

Fuente: 

100 Recetas Sanas con alimentos que curan

100 Alimentos que mejoran tu salud