Jalea de madroños

Es la primera vez que comparto una jalea en este blog, y casi que la hago.  Soy muy fan de las mermeladas con tropezones, por eso nunca hago jaleas, salvo que sea estrictamente necesario, y en este caso lo es. Los madroños tienen unas semillas muy desagradables así que la única manera es tamizar.

La jalea resultó  exquisita, con un sabor diferente a las que conozco.  Es muy rica en pectina y  enseguida se aglutina, pero es bastante laboriosa. Lo cierto es que cuando recogí los madroños, que me enamoran por lo bonitos que son, no me imaginé que me iba a liar tanto.

Hasta ahora en el entorno por donde paseo habitualmente nunca vi madroños, cierto es porque no me fijé, porque estos árboles donde los recogí, ya son mayorcitos, y paso con frecuencia cerca de ellos; pero solo llamaron mi atención el otro día porque estaban tan llenitos de frutos, que parecían arbolitos de navidad llenos de bolas rojas, estaban además maduritos, así que decidí llevarme algunos para preparar una mermelada.  

Al buscar recetas ya me di cuenta que la cosa no iba a ser sencillas ¿pero que iba hacer, tirar todos aquellos madroños? No es lo mío!  Así que a trabajar.

El resultado, aquí está, y no es el único, el otro ya lo veréis la semana que viene.

Ingredientes:

 1º paso

• 1.600 de madroños
• 1 naranja
• 1/2 limón 
• 100 ml de agua

2º paso

• 700 g de pulpa de madroño
• 300 g de azúcar

Elaboración:

1º paso

1. Lavamos los madroños y los introducimos en una olla inmediatamente, incorporamos los zumos de la
2. naranja y 1/2 limón y el agua. lo llevamos al fuego y dejamos que se cocinen hasta que se deshagan. Tardaron 15 minutos.
3. Filtramos la pasta de los madroños  a través de un tamiz. pero lo que pasó, es que al ser las semillas tan finas la mayoría pasaron por los agujeros el tamiz, por lo cual necesité pasarlas por un segundo tamiz, usé el de la batidora, que tienen agujeros muy menudos y no permiten que pasen las semillas. Esta fue la parte más complicada de la elaboración de la jalea, porque esto me llevó bastante tiempo, y el desperdicio es tremendo, de los 1.700 g +  657 son irrecuperables.

2º paso

1. Ponemos en un cazo el liquido resultante,  añadimos el azúcar y lo cocemos durante 15 minutos. Para saber si está en su punto , se pone una gota de jalea en el borde de un plato frío; si queda adherida a él, está lista para consumir o si es mucha cantidad envasarla para conservarla.

 Y otros frutos de temporada que están divinos envasados:

https://www.cousasdemilia.com/2012/11/mermelada-de-castanas-al-anis-con-brandy.html

https://www.cousasdemilia.com/2014/03/mermelada-de-calabaza-al-whisky.html

¡Feliz semana!